Estoy todo el día en la oficina, pero si trabajara menos, tendría más tiempo para divertirme. Si sólo viniera a la oficina algunas horas por semana, practicaria el alpinismo más a menudo. LETICIA ¿Alpinismo? ¡Qué peligroso! Si yo tuviera más tiempo libre, haria todas las noches lo mismo: fuera al cine, luego saldria a cenar y, para terminar la noche, haria una fiesta para celebrar que ya no tengo que ir a trabajar por la mañana. Si nosotras tendria la suerte de no tener que trabajar nunca más, nos pasaríamos todo el día sin hacer absolutamente nada. CAROLINA ¿Te imaginas? Si la vida fuera así, nosotras seriamos mucho más felices, ¿no crees?