Las abejas son una especie fascinante. Viven en colmenas dentro de un orden social muy estructurado. Cada colmena contiene una reina, unos cientos de zánganos, o abejas macho, y las abejas obreras, todas hembras. Las colmenas silvestres (salvajes) contendrán hasta 20 000 abejas, mientras que las abejas manejadas pueden vivir en colonias de hasta 80 000 abejas. El propósito principal de las abejas zánganos es aparearse con la reina, y su único propósito es producir huevos. La reina vive de dos a cinco años, mientras que los zánganos viven solo unas 8 semanas. Todas las tareas de limpieza en la colmena son realizadas por las abejas obreras, que constituyen la mayor parte de la colmena. La mayoría de las abejas obreras viven unas seis semanas, excepto las que nacen a finales del otoño. Vivirán hasta la primavera siguiente. Las abejas obreras tienen un aguijón con púas que se les arranca del abdomen al usarlo, lo que las mata, por lo que solo se puede usar una vez. El aguijón de la reina no tiene púas; por lo tanto, no muere cuando pica a un rival.
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¿Por qué el autor describe el papel de cada abeja?
A.
para mostrar la variedad de la calidad de vida y la duración
B.
para demostrar que tienen un orden social estructurado
C.
para demostrar que esa reina gobierna sobre las demás
D.
para mostrar cómo sus cuerpos se relacionan con su trabajo